Prevención de la gastroenteritis

Aunque no se trata de una enfermedad grave, lo cierto es que sí produce molestias y dolores que nadie quisiera padecer. Por ello, resulta muy importante tomar medidas para evitar que esta infección se propague y aquí te ayudamos con algunas medidas a tomar:

• La gastroenteritis es una enfermedad causada normalmente por un virus, de modo que el contagio se produce por contacto con una persona que ya padecía esta infección, la cual expulsará estos patógenos a través de los vómitos y deposiciones. De este modo, la prevención se basará en medidas de higiene y reducir la exposición del enfermo.

• Así mismo, también es posible que la gastroenteritis se produzca a causa de la ingesta de alimentos contaminados o en mal estado, por lo que deberá prestarse especial atención a aquello que haya podido ser infectado y no consumirlo.

• En caso de que algún familiar, amigo, compañero de trabajo, etc. haya contraído esta enfermedad gastrointestinal, será fundamental extremar las medidas preventivas para que no nos contagie. Esto toma una especial importancia en el caso de la gastroenteritis en niños, ya que entre los pequeños es mucho más fácil que se propague. Por este motivo, después de la aparición de los primeros síntomas, el paciente deberá mantener reposo en casa y no ir al trabajo o al colegio.

• Además, las personas que cuiden o traten a un enfermo de gastroenteritis deberán lavarse las manos con frecuencia para prevenir un posible contagio. De lo contrario, los gérmenes podrán llegar a nuestro organismo e infectarnos.

• Por el mismo motivo, será imprescindible no compartir vasos, cubiertos y otros utensilios mientras dure la infección gastrointestinal, así como también se deberá evitar el uso compartido de objetos de higiene personal como toallas.

• A la hora de cocinar, también se deberán extremar las medidas de higiene, especialmente si se existe la sospecha de que ha sido algún alimento el que ha causado la gastroenteritis. Para prevenir esta enfermedad, deberán lavarse muy bien los alimentos -en especial, los que se comen crudos- y no tomar productos que estén en mal estado.